La parcialidad nacio como asociación civil no lucrativa en 2011 en el municipio de Totonicapán, cantón Juchanep. El origen de su nombre se concentra en la persona de Achí Chaclán, el ancestro común, a quien pertenecían las tierras.
Todos los miembros de la comunidad se definen como indígenas kiche’, descendientes de quienes siempre han cuidado el bosque. Su relación con este entorno refleja, por lo tanto, un fuerte vínculo con la naturaleza, asociado a una ancestralidad y una cosmovisión que se expresa discretamente en los rituales mayas.
Su percepción del bosque y sus recursos naturales no se basa en la apropiación o el dominio sobre ellos, ni en una relación de poder. Los miembros de esta comunidad consideran que su función es cuidar y proteger el bosque en una relación armoniosa constante y permanente. Se encargan de monitorear diariamente los bosques para prevenir talas ilegales y otras problemáticas que puedan afectar la biodiversidad.